Un año más no quise perderme la Feria de Caza Potes 2019 y como en otras ocasiones, aproveché el evento para visitar la comarca lebaniega junto a mi familia.
Una tierra de gran tradición cinegética, que respira caza por sus cuatro costados y hacia la que tengo una profunda afinidad, quizás por ser parte de mis orígenes, pero también por su enorme belleza natural y la calidez de trato de sus gentes.
La feria, sin embargo, aunque siempre es un acontecimiento importante y un nexo de unión para los amantes de la caza, merece una profunda revisión para futuras ediciones, pues en mí opinión, tiene un gran potencial que a menudo queda desaprovechado.
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Feria de Caza Potes 2019
A diferencia del año anterior, en el que predominó la lluvia y el mal tiempo, el buen clima de este fin de semana motivó la abundancia de gente en la Feria de Caza Potes 2019.
Mucho ambiente en las carpas y en los aledaños de la feria, asi como en las terrazas cercanas, en las que costaba encontrar una mesa libre para sentarse a disfrutar de un buen vermouth y unas rabas.
Una buena oferta gastronómica en la mayoría de restaurantes, en la que predominaba la carne de caza.
Y muchas caras conocidas con las que pararse a charlar un rato e intercambiar opiniones y batallitas de la reciente temporada ya finalizada.
Alimentación, artesanía, pesca, caza…
En el interior de la carpa se congregaron muchas empresas de la provincia, pero también de diferentes enclaves del panorama nacional, que ponían en valor distintos productos de carácter alimentario, cinegético, artesanía en madera o metal, relacionados con la caza…
Para llenar el estómago había de todo y muy bueno…
Boronos, quesos, buenas hogazas de pan y preñados de chorizo, aceites de oliva, vinos y licores… Imposible no salir con hambre, porque realmente había productos con muy buena pinta y de gran calidad.
Destacaba algún puesto de artesanía con madera, aunque menos de los que me hubiese gustado.
Alguna que otra armería, con ropa y complementos para el cazador.
Taxidermia, cuchillería, electrónica…
Y en menor medida, también había un pequeño espacio dedicado a los amantes de la pesca.
Un espacio para el perro de caza en la Feria de Caza Potes 2019
En el exterior, 6 ó 7 ejemplares del afijo Setter De los Carbayos, propiedad de Rafael Llames, lideraban la representación del perro de muestra.
Me gustó especialmente uno de sus setters: Ducan de Piago. Un precioso animal de 2 años de edad, con gran potencial y que ya ha hecho sus primeros pinitos en el monte con las becadas, tal y como me comentaba Rafa.
De igual forma, distintos criadores llevaron algunos de sus mejores perros de rastro y caza mayor a la feria, permitiendo a los amantes del perro de caza, como es mi caso, pasar un buen rato admirando líneas y comentando el potencial y posibilidades de cada uno.
Exhibición de perros de muestra
Para la jornada del domingo había preparada una exhibición de perros de muestra sobre codornices de granja a poca distancia de la feria.
Una buena oportunidad para ver en acción a los setters de Rafa, pero también a dos jóvenes pointers con muy buena traza e incluso a otro cachorro de setter, con mucha pasión y ganas, pero aún en fase de aprendizaje.
Seguramente podría haberse preparado mucho mejor, pero igualmente disfruté viendo las muestras y patrones que se sucedían sobre aquellas codornices, que sin ese carácter tan salvaje de las originales , pegaron algún que otro vuelo más que curioso.
Exhibición de cetrería
Lamentablemente no pude asistir a la exhibición y, aunque en realidad mis conocimientos sobre la disciplina son muy escuetos, es algo que me gusta ver y que sin duda, considero un gran atractivo en este tipo de eventos.
Al final y al cabo, la cetrería representa la caza en estado puro, “de igual a igual”.
Sin embargo, en la carpa principal, si que tuve tiempo de admirar algunos de los impresionantes pájaros que posteriormente protagonizarían la exhibición.
Solo admirar su belleza y esa mirada salvaje que les caracteriza, es un auténtico lujazo.
Un gran evento, que sin duda podría mejorar
Pasé un buen día en familia, en un ambiente que me gusta y volví a casa satisfecho, pero con la sensación de que a esta feria se le puede extraer muchísimo más jugo.
Principalmente, echo en falta un enfoque más venatorio y no tan centrado en la alimentación.
En Muskiz, una feria muy similar, tanto en amplitud, como probablemente en recursos, la presencia de artesanos cinegéticos daba un color especial a la jornada, algo que hubiese gustado ver en Potes.
Con tanto espacio, ya no solo en la Serna, sino en las zonas aledañas, un mayor protagonismo del perro de caza hubiese complacido a muchos de los asistentes, pues al fin y al cabo, no deja de ser pieza fundamental en la mayoría de disciplinas de caza.
Incluso la exhibición de perros de muestra, algo que debería promoverse con otras líneas cazadoras, podría haber estado mucho mejor preparada para el deleite del espectador.
¿Y por qué no…?. Alguna que otra ponencia de los distintos personajes emblemáticos que representan fielmente las características de este noble arte, sorteos de valor que realmente capten el interés del visitante, concursos de tiro al plato…
Sin olvidarnos de la pesca, que para mí fue el gran ausente en la Feria de Caza Potes 2019.
Volveremos en la próxima edición de la Feria de Caza Potes 2019
En cualquier caso, con mejoras o sin ellas, seguramente volveré en las próximas ediciones, porque si algo debemos hacer los cazadores, más aún en estos tiempos difíciles para nuestra actividad, es apoyar y ponderar eventos de este estilo, pues si no lo hacemos nosotros…
Un saludo y buena caza
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Amante de la caza y la naturaleza, enamorado del setter inglés y sordero empedernido. Entre encinas, robles y hayas disfruto de cada instante que me ofrece el monte, alejándome cada vez más del lamentable postureo cinegético.